Recordando aquel viejo cuento infantil en el que se decía “ahí viene el lobo, ahí viene el lobo, ahí viene el lobo” pues, llegó el lobo: tenemos nueva reconversión monetaria… perdón… Nueva Expresión Monetaria.
A partir del 1ro de octubre tendremos los cambios ya conocidos de las dos versiones anteriores, en la manera de escribir las cifras, en la forma de presentar los precios, y, sobre todo, en el efecto en el capital y valor de los activos no monetarios. Lo procedente entonces es evaluar qué hacer para que el patrimonio no se desdibuje.