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Guía para la Sostenibilidad Corporativa

De la Ética a la Confianza del Mercado

Armando Alvarez Massieu. Oficial de Cumplimiento, Ética y Calidad
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Tejiendo la Sostenibilidad en la Cultura Corporativa
La Ética como ADN de la Sostenibilidad

En el dinámico entorno empresarial de hoy, la sostenibilidad ha trascendido el discurso para convertirse en un pilar estratégico fundamental. Inversores, reguladores, clientes y el talento que buscamos atraer ya no solo evalúan el rendimiento financiero de una empresa, sino también su impacto ambiental, su compromiso social y la solidez de su gobernanza. Este nuevo paradigma, conocido como ESG (Environmental, Social, and Governance), es ahora el lenguaje universal para medir la creación de valor a largo plazo.

Navegar el universo ESG no es simplemente una cuestión de recopilar datos y publicar un informe. Es un ejercicio profundo de integridad, transparencia y estrategia. Para las organizaciones que buscan liderar, el objetivo es construir una base de confianza tan sólida y verificable como la de sus estados financieros auditados. Esta guía explora el viaje completo para construir una estrategia de sostenibilidad exitosa y creíble, demostrando cómo un enfoque riguroso puede transformarse en un valor duradero y una ventaja competitiva.

El Fundamento Inquebrantable: La Ética como ADN de la Sostenibilidad

Todo comienza con un compromiso inquebrantable con la ética. Antes de que se calcule una sola métrica, debe existir una cultura que valore la honestidad por encima de la conveniencia. El Código de Ética del IESBA establece cinco principios fundamentales que deben actuar como la brújula moral para cualquier profesional involucrado en este proceso:

  1. Integridad: Ser franco, honesto y directo en todas las relaciones profesionales y de negocio.
  2. Objetividad: No permitir que sesgos, conflictos de interés o la influencia indebida de otros anulen los juicios profesionales.
  3. Competencia y Diligencia Profesional: Mantener el conocimiento y las habilidades profesionales al nivel requerido para asegurar que los clientes o la entidad empleadora reciben un servicio competente, y actuar con esmero de acuerdo con las normas técnicas y profesionales aplicables.
  4. Confidencialidad: Respetar la privacidad de la información obtenida como resultado de relaciones profesionales y de negocio.
  5. Comportamiento Profesional: Cumplir con las leyes y regulaciones pertinentes y evitar cualquier conducta que el profesional sepa o deba saber que podría desacreditar a la profesión.

Estos principios se ponen a prueba en escenarios del mundo real. Por ejemplo, al afrontar la realidad de la cadena de valor, una empresa debe lidiar con la complejidad de la huella de carbono. Esta se divide en tres categorías: Alcance 1 (emisiones directas de fuentes propias o controladas), Alcance 2 (emisiones indirectas por la generación de energía comprada) y Alcance 3 (todas las demás emisiones indirectas que ocurren en la cadena de valor de una empresa, incluyendo proveedores, transporte, uso de productos y más). Si un proveedor clave carece de datos fiables para el Alcance 3, los principios de Integridad y Comportamiento Profesional prohíben ocultar esta debilidad. La respuesta ética es la transparencia radical: declarar las limitaciones, explicar las medidas para mejorar la recopilación de datos y presentar un plan a futuro.

Tejiendo la Sostenibilidad en la Cultura Corporativa

Un informe de sostenibilidad robusto no es producto de un área de la organización y/o entidad; es el reflejo de una cultura organizacional bien orquestada. La responsabilidad ética debe extenderse por todas las áreas funcionales, creando una cadena de integridad desde el origen del dato hasta su publicación final.

  • El Área de Administración y Operaciones es la guardiana de la huella operativa. Su responsabilidad ética es transformar los datos brutos de consumo en métricas de emisiones de Alcance 1 y 2 que sean fiables, consistentes y comparables.
  • El Área de Capital Humano custodia el activo más importante: las personas. Su compromiso ético es reportar con Objetividad métricas sobre diversidad, equidad e inclusión, desarrollo profesional y bienestar, dando vida al pilar "Social".
  • El Área de Cumplimiento (Compliance), que reporta directamente al comité ejecutivo y/o a la junta directiva, es el eje de la buena gobernanza. Su contribución a la sostenibilidad se manifiesta en asegurar la adhesión inquebrantable al Código de Ética y Conducta. Un sistema de Cumplimiento efectivo, apoyado por canales de denuncia seguros, asegura que se tomen las decisiones correctas, garantizando la viabilidad del negocio a largo plazo, que es la esencia de la gobernanza sostenible.

El Sello de la Confianza: Del Dato Interno a la Validación del Mercado

Una vez que una organización ha tejido esta red de responsabilidad interna, ¿cómo demuestra su compromiso al mundo exterior de una manera irrefutable? El paso final que cierra el círculo de la confianza es someter su trabajo al escrutinio externo.

Esto se logra a través del aseguramiento de la sostenibilidad, un proceso donde un profesional independiente evalúa la información ESG de una empresa, de forma análoga a una auditoría financiera. Este proceso, guiado por normas internacionales como las IESSA (Normas Internacionales de Ética para el Aseguramiento de la Sostenibilidad), verifica que los datos son precisos y fiables. Prepararse hoy para un futuro donde el aseguramiento será el estándar del mercado es una decisión estratégica que ofrece beneficios tangibles:

  1. Ventaja Competitiva y Acceso a Capital: Un informe con aseguramiento externo tiene un peso mucho mayor para los inversores, analistas y agencias de calificación.
  2. Eficiencia y Reducción de Costos a Futuro: Las empresas que implementan desde ahora los controles y procesos adecuados experimentarán un proceso de aseguramiento mucho más fluido, rápido y económico.
  3. Fortalecimiento de la Cultura Interna: La preparación para el escrutinio externo obliga a toda la organización a tomarse la sostenibilidad en serio, transformando el reporte de una obligación a un verdadero motor de mejora continua.

El camino hacia una sostenibilidad auténtica y verificable es un viaje estratégico que requiere una guía experta. Asociarse con consultores que no solo comprenden los marcos de reporte, sino que viven y respiran los principios de integridad y diligencia profesional, es lo que distingue a las organizaciones que simplemente cumplen de aquellas que lideran y prosperan en la nueva economía.