Activos fijos de larga duración

¿Tus activos fijos de larga duración se encuentran adecuadamente valuados en tu organización?

El contar con activos fijos de larga duración correctamente valuados, ha sido una constante preocupación para los usuarios que interactúan a diario con la información financiera, tales como instituciones financieras, socios, accionistas, organismos emisores, entre otros.

Es por ello que las entidades que emiten sus estados financieros con base en las Normas Mexicanas de Información Financiera (NIF), deben evaluar si están cumpliendo con la NIF C-15 “Deterioro en el valor de los activos de larga duración y su disposición”, la cual fue emitida por el Consejo Mexicano de Normas de Información Financiera (CINIF). Esta NIF inició su vigencia a partir del 1o. de enero de 2022, permitiendo su aplicación anticipada.

Las entidades al adquirir o producir activos fijos de larga duración, esperan que estos generen beneficios fundadamente esperados. Dichos activos son reconocidos inicialmente a su costo de adquisición; sin embargo, con el paso del tiempo puede haber circunstancias externas o internas que ocasionen deméritos importantes en el valor de los activos, ocasionando que el valor neto en libros sea mayor a los beneficios económicos futuros fundadamente esperados, lo cual generaría un ajuste del valor neto en libros.

Debido a lo anterior, se hace necesario que las entidades analicen la existencia de un posible deterioro en el valor de sus activos, a través de la indagación tanto de fuentes internas como externas y así determinar, el momento en el cual se debe efectuar la prueba de deterioro con base en la metodología de la NIF C-15. Dicha norma  nos establece las normas de valuación, presentación y revelación para el reconocimiento contable, de una pérdida por deterioro en el valor de los activos de larga duración, así como su reversión.

Como consultores externos, Crowe te pueden brindar asesoría, capacitación y acompañamiento en el proceso de análisis para la determinación de una posible existencia por deterioro, con la finalidad de presentar valores relevantes y confiables en los estados financieros, evitando mantener pérdidas ocultas en las cifras.