El talento español toma el mando de los bufetes internacionales

Liderar un gran despacho internacional no es fácil, pero menos para un abogado que ni siquiera pertenece ni ha desarrollado su carrera profesional en la sede central. 

Sin embargo, un currículo brillante es la mejor puerta de entrada para este cargo tan ansiado. En la actualidad, Luis Fernando Guerra es el único español que se encuentra en lo más alto de su firma al liderar Deloitte Legal, un puesto que compatibiliza con el de socio director en España. Precisamente, sus diez años al frente de un despacho que casi ha triplicado la facturación en esta década fueron algunos de los méritos que le hicieron saltar a lo más alto de Deloitte Legal a nivel mundial.

No obstante, Guerra no está solo en la cúspide de la abogacía internacional, ya que algo más de una docena de letrados le acompañan. Entre ellos, destacan Ramón Mullerat, número 2 de servicios legales de PwC y responsable de clientes y mercados, y Nuria Martín, presidenta del consejo internacional de socios de Osborne Clarke, a los que acompañan os miembros del comité de dirección mundial Antoni Bover (Mazars), Jordi Casas (Osborne), José Manuel Cuenca (Clifford), Luis Miguel de Dios y Rafael Suárez de Lezo CMS), Juan José García (Yingke), María Pilar García (WFW), Ignacio Legido (BDO), Jaime Olleros (Ander-sen), Jaime Pérez-Bustamante (Linklaters) y Esteban Raventós (Baker). Además, Ana García Fau es consejera independiente de DLA.

Asimismo, la representación de abogados españoles en puestos directivos por zonas geográficas o por prácticas es extensa. En este sentido, más de medio centenar de letrados de nuestro país son los encargados de dirigir equipos transnacionales, diseñar e implementar estrategias de consolidación y crecimiento, además de innovar y buscar nuevas fórmulas para responder a las exigencias de clientes por todo el mundo.

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